Estimado señor:
Como ud. sabrá hace pocos días publicamos en España una nota hablando del abandono de algunos de los CRJ de Pluna, que fue posible fotografiar (enfoques, edición 1895) con colonias de hongos bajo el fuselaje y otros signos de abandono.
Ante ello, me pregunto adónde se invirtió el dinero teóricamente destinado al mantenimiento básico mensual de estas aeronaves. Personalmente, quien suscribe, tanto como integrante de la Cámara Uruguaya de la Industria Aeronáutica, o periodista largamente especializado en estos temas aeronáuticos, ya hace 3 décadas, solo ha podido observar, en los círculos habituales, a uno o dos mecánicos de la ex aerolínea.
Además, se habla de 9 motores defectuosos (y no lo tengo, en principio, que poner en duda), aunque en agosto de 2012 un interesado me había confidenciado que eran 3, y por cenizas volcánicas, siendo sí una impresión aceptada, algún mantenimiento mayor para alguna de las aeronaves.
Nótese que uno de los jerarcas de Pluna Ente al cierre de los vuelos, preguntaba por esos 3 motores defectuosos y ese extremo se le negó...
Lo interesante, señor, es que, mientras se acerca a nuestro país, para adquirir aeronaves en la órbita privada, la conocida firma nórdica NAC, para comprar los CRJ recurre a una ignota intermediaria sin aeronaves ni tradición, e inclusive, dos veces cerrada en USA, que ni dirección física registra, y sobre la cual los contactos telefónicos de colegas fueron infructuosos en Miami, así como pasar más allá de su site provisorio. Solo se mencionó a un tal Dr. Rodriguez Villamil, que luego no apareció...
Me pregunto, de forma pertinente, si no es innecesario esa intermediación con la firma europea, o consttituye una extraña "condición" para concretar la operación, en cuyo caso Aupe tiene mucho que decir... (como del mantenimiento de los aviones)
Lamentablemente me informan en Aupe, de no muy simpática forma, que ni por teléfono ni personalmente es ud. ubicable.
Yo sí.
Atentamente,
Javier Bonilla
(siguen teléfonos y direcciones)