Edición Nro. 2334 - Punta del Este / Uruguay
enfoques 10 y 11 de noviembre de 2023
 
 
Inicio Contáctenos Ediciones_anteriores Agregar_a_Favoritos
VERSION PARA MOVILES
Todas_las Secciones AEROPUERTOS,_AVIACIÓN_COMERCIAL_Y_TURISMO ¡¿QUÉ_DICE_LA_PRENSA?! PLUMAS_ILUSTRADAS UN_ARGENTINO_ORIENTAL_OPINA_-_ENFOQUES_COMPARTIDOS
UN ARGENTINO ORIENTAL OPINA - ENFOQUES COMPARTIDOS f
Enrique Guillermo Avogadro
Sin Miedo
  • “A veces, uno sabe de qué lado estar simplemente viendo quiénes están del otro lado”. Leonard Cohen
El mundo entero parece haberse aficionado a jugar al TEG pero con armas cada vez más letales; más allá de la horrorosa incursión de Hamas en Israel, a través de la cual Irán está modificando todo el mapa político de Medio Oriente, y de la salvaje invasión de Rusia a Ucrania, que logra lo mismo en Europa, el clima bélico también ha llegado a Sudamérica. Así, algunos países de la región van frustrando las siniestras intenciones del Foro de São Paulo pero, a la vez, otros ponen en riesgo la paz que, durante tantos años fue un privilegio del subcontinente.
Toca felicitar a la ciudadanía colombiana que, el domingo pasado, reaccionó sin miendo y comenzó a revertir el camino de destrucción que inició al elegir como Presidente a Gustavo Petro, el ex guerrillero de las FARC que integra el arco nefasto del “socialismo del siglo XXI”. Lo hizo en las elecciones regionales que la oposición ganó por amplísimo margen y, como perla, llevó a la Alcaidía de Bogotá a Carlos Fernando Galán, hijo de un candidato presidencial asesinado por Pablo Escobar Gaviria en 1989.
La misma reacción se percibe en Venezuela, donde el narco-régimen de Nicolás Maduro se ve, por primera vez, fuertemente cuestionado por el gran éxito (92%) alcanzado sin miedo por Corina Machado en las internas de la oposición. Cuando la dictadura aceptó las negociaciones en Barbados para garantizar elecciones libres, el mundo libre levantó algunas de las sanciones económicas impuestas; sin embargo, a pocos días de ello, el chavismo las vuelve a motivar anulando los resultados de esas elecciones, persiguiendo a su vencedora y, además, buscando una insensata guerra contra Guyana por la región de Esequibo, para insuflar un instinto nacionalista que logre aglutinar en su apoyo a la opinión pública. ¿Algún parecido con la Argentina?
En Chile, el bastión socialista de buenos modales, el gobierno de Gabriel Boric está nuevamente jaqueado en el proceso de reforma constitucional, en el cual la derecha ha impuesto sus criterios y mandado al arcón de los malos recuerdos las exóticas propuestas de instalar una nación plurinacional y suprimir al Senado. Bolivia, el modelo que pretendió imitar la izquierda chilena, se ha transformado en la base terrorista regional de Irán, como Venezuela, y el gobierno de Luis Arce está emitiendo pasaportes a iraníes que pasan a nuestro territorio por fronteras que son verdaderos coladores, olvidando que el país de los ayatollahs fue el responsable de los peores atentados que sufrimos, los de la Embajada de Israel y la AMIA.
Volviendo a la Argentina, el Aceitoso “vende” haber ganado ya el ballotage que se disputará dentro de dos semanas, pese a ser el máximo responsable de la tragedia socio-económica que vivimos. En pos de ese hipotético triunfo, devastó aún más la tierra arrasada en que ha convertido al país con su “plan platita 3” y con la degradación de la democracia que implica la “campaña de miedo” que instrumentó utilizando las empresas públicas. Pero la realidad es bien distinta, ya que la gran mayoría se expresó en contra del proyecto de Sergio Massa, que sólo concitó el apoyo del 37% del electorado, en la peor performance del peronismo en toda su historia; seguramente, teme que la mayoría republicana ponga fin a sus sueños.
He sido desde aquí duro crítico de las propuestas más disruptivas de Javier Milei, y no me arrepiento de haberlo hecho. Sin embargo, ahora no sólo lo apoyo sino que milito activamente a favor de su candidatura. Y lo hago por dos razones muy simples: la primera, es que estoy convencido que necesitará negociar para adquirir una gobernabilidad que la escasez de legisladores y la carencia de gobernadores propios le retaceará y, así, su conducta podrá ser controlada por el Congreso y por la Justicia; y la segunda, más determinante, surge de observar el tren fantasma de quienes rodean al Aceitoso y su mujer, Malena Galmarini, mientras recuerdo cuán peligrosos son, ya que coinciden tanto en su amoralidad cuanto en su riqueza mal habida, producto de su rara relación con el narcotráfico.
Esta nueva mutación del peronismo transporta en su vagones a los peores líderes gremiales (vgr, Hugo Moyano y Roberto Baradel), los eternos señores feudales de las más pobres provincias (Gildo Insfrán, Osvaldo Jaldo y Gerardo Zamora), los abyectos “barones” del Conurbano (con Martín Insaurralde portando la incombustible bandera), los empresarios prebendarios y corruptos, y hasta los integrantes de ese extraño radicalismo transformado en bolsa de empleo público (Ricardito Alfonsín, Gerardo Morales, Martín Lousteau, Emiliano Yacobitti, Miguel del Sel).
Por todo eso, y en especial por el daño terminal que significaría para el país extender, al menos por otros veinte años, un sistema de gobierno tan corrupto y nefasto como el que perfeccionará y extremará Sergio Massa si se hiciera con el poder. Pero, así como ya podemos dejar de tener miedo a que la región entera se vista de rojo, también debemos actuar con coraje y decisión para conseguir que ese saludable hálito que la recorre llegue a la Argentina. Recuperarnos de esta prolongada enfermedad llevará tiempo y dolor pero, estoy seguro, podemos lograrlo y recuperar el futuro para nuestros hijos y nietos, evitando que se vean obligados a emigrar para intentarlo encontrarlo fuera.



ADVERTENCIA: Los artículos periodísticos firmados son de la exclusiva responsabilidad de sus autores. La Dirección.



Un extraño caso
Por Julio María Sanguinetti. Es muy raro que un hecho legal, indiscutiblemente regular, pueda generar una crisis que se lleve a cinco jerarcas de primera línea, que venían cumpliendo relevantes gestiones. Si ese hecho administrativamente correcto (esto nadie lo discute) es, además, el simple otorgamiento de un pasaporte, resulta aún más paradójico. Pero eso es lo que ocurrió en este episodio de noviembre de 2021, que termina generando dos años después un terremoto político.

Estamos hablando de un pasaporte pedido el 20 de octubre de 2021 y otorgado el 25 de noviembre, no en el día como se dice y se repite. No había requisitoria uruguaya ni de Interpol. Por el decreto vigente, la Cancillería estaba obligada a otorgar el documento, simplemente porque ese ciudadano uruguayo tenía el derecho a recibirlo. Es parte de sus títulos de identidad. Tan claro como eso.
No tiene nada que ver la apreciación de que podría habérsele dado un documento de viaje, cuando está claro que eso es para personas expulsadas de un país y obligadas a retornar al de origen.
En todo caso, se acumularon confusiones. Si el pasaporte lo debía expedir el Ministerio del Interior o el de Relaciones Exteriores, si la autoridad estaba obligada o no a expedirlo, si los Subsecretarios estaban informados, si intercambiaron chats entre ellos, si cada uno puede o no borrar el chat propio, si romper una protocolización integra o no el expediente... si... si...
Con el diario del lunes, está claro que la información pública fue confusa y que mediaron contradicciones entre los actores y ello significó su responsabilidad política. El gobierno procedió correctamente, con dolor personal del Presidente seguramente, pero con el rigor imprescindible dada la situación. No había otro modo de saldar el conflicto político. Era, por otra parte, lo que reclamaba una oposición, que ahora tampoco se da por satisfecha y trata de explotar aviesamente el episodio.
El Frente Amplio, que cuando fue gobierno ocurrió que un probado jefe mafioso italiano, Morabito, que estaba preso aquí, se fue caminando de la cárcel sin que Ministro alguno se hiciera responsable, grita ahora cuando el gobierno actúa con un rigor político por ellos desconocido.
Se habla maliciosamente de corrupción, cuando no hay el menor atisbo de ella. ¿Alguien hizo algo ilegal a cambio de una compensación, un beneficio del tipo que sea? ¿Hay alguna sospecha? Ninguna. El contacto con el abogado del involucrado no pasó de una pequeña reunión de pocos minutos con la Subsecretaria. La oposición está abusando de su condición, como lo hizo el lunes pasado en ocasión de la inauguración del Hospital del Cerro, en que una patota embanderada con el Frente Amplio protagonizó una irrupción violenta en un acto de celebración. Estuvimos allí y realmente fue entristecedor. El edificio inaugurado es magnífico, llena una necesidad histórica del Oeste de Montevideo, había una multitud acompañando... En ese contexto irrumpe el insulto, la prepotencia, la injerencia patotera hasta con los periodistas. No hemos oído ningún pedido de disculpas del locuaz portavoz del Frente Amplio. No nos llama la atención, porque para ellos tirar una bomba de humo en un acto oficial no es violencia y poner pancartas proselitistas en un liceo no agrede la laicidad. Naturalmente, no debemos dejarnos arrastrar por esa intolerancia con otra de signo contrario, pero no por eso debe dejarse pasar en silencio el atropello.
Así como el tema político está laudado, transcurre todavía un procedimiento fiscal. Desgraciadamente, hoy, en ese terreno ya no media más el clásico "secreto del presumario" que durante años permitió que la Justicia actuara en un clima sereno. Todo sale a luz instantemente, en crudo, para ser materia prima de crónicas en las que, aun sin proponérselo el periodista, se absuelve y condena por la sola publicidad. Esperamos un procedimiento serio e imparcial. En lo personal decimos que no se ha dañado el patrimonio del Estado como fue común en los últimos años, sin sanción a la vista. Informar bien o mal, discrepar unos jerarcas, cometer eventuales errores o contradicciones podrá merecer cuestionamientos políticos pero no otra cosa, sobre todo cuando, repetimos, en el origen de todo este trajinar se trató de un acto legítimo.
Realmente lamentamos esta ocurrencia que bien puede calificarse de un daño autoinfligido por el gobierno. El error no forzado del que hablan los aficionados al tenis. Es un tropezón indudable, grave en cuanto a las consecuencias y magnificado hasta el delirio por quienes insinuaban, e insinúan, afectaciones institucionales. Para nosotros, como miembros de la coalición, es un desafío más a superar. Un llamado a redoblar el esfuerzo para continuar la acción reformadora de este gobierno, que atravesó pandemias y guerras, con equilibrio, recuperando salario real, aumentando empleo, bajando el peor de los impuestos que es la inflación, incluso emprendiendo imprescindibles reformas de fondo en prioridades nacionales como la seguridad social o la educación.
Historias del pasado no pueden comprometer el futuro.

POLÍTICOS
El clavo en el sillón

"Esteban siempre me invita a presentar sus libros que es como encargarles la corrección ortográfica a los abogados de ASSE. Le aporto tanto a su éxito editorial como el Estado Islámico a la paz mundial o, para ser más gráficos, como Asamblea Uruguay al BPS.
Hay distintas maneras de poner un clavo en el sillón sin necesidad de hacer un curso de bricolaje. Vos sentás a Sendic en el directorio de un ente y ahí tenés un clavo en un sillón. Tremendo clavo. Un clavo de carpintero porque es un clavo sin cabeza, pero un clavo al fin.


El pasado domingo se presentò 'El clavo en el Sillón', la última obra de Esteban Valenti editado por Sudamericana.
La presentación tuvo como expositores a Fernando López D'Alessandro, historiador de vasta trayectoria, y Fernando Schmidt, escritor, dramaturgo y guionista de cine, carnaval, radio y televisión.
Palabras de Fernando Schmidt en el colmado Salón Dorado de la IMM:
"Esteban siempre me invita a presentar sus libros que es como encargarles la corrección ortográfica a los abogados de ASSE. Le aporto tanto a su éxito editorial como el Estado Islámico a la paz mundial o, para ser más gráficos, como Asamblea Uruguay al BPS.
Hay distintas maneras de poner un clavo en el sillón sin necesidad de hacer un curso de bricolaje. Vos sentás a Sendic en el directorio de un ente y ahí tenés un clavo en un sillón. Tremendo clavo. Un clavo de carpintero porque es un clavo sin cabeza, pero un clavo al fin.
Valenti dice que hay que distinguir el clavo en el sillón del tornillo en el sillón. También están los remaches. Pero los tornillos son bastante más comunes, porque los políticos suelen estar atornillados al sillón. Con un tornillo les alcanza, porque así como los músicos nacen con un talento natural, así como los buenos delanteros nacen con olfato de gol, o así como todo bebé trae un pan abajo del brazo, el político te viene con un taco Fischer en el culo. Por eso se sienta en el tornillo y queda ahí por siempre, más agarrado que vieja en moto.
Por eso también las cagadas son tan grandes, debido al efecto dilatador del taco Fischer. Pero esto es una reunión literaria; no venimos acá a hablar de cagadas, estamos en la Feria del Libro y no en un Tribunal de Conducta Política.
Los griegos y los alemanes siempre han tenido invenciones complementarias. Los griegos inventaron los grandes géneros literarios, los alemanes inventaron la imprenta.
Los griegos inventaron la Medicina y los alemanes inventaron los rayos X.
Los griegos inventaron la democracia y los alemanes inventaron la aspirina.
Los griegos inventaron la tragedia, los alemanes el holocausto.
Por eso no sorprende que los griegos inventaran la política y los alemanes el taco Fischer.
Al sillón, en cambio lo inventaron los egipcios.
Al político no hay quien lo mueva y los frenteamplistas no son la excepción. En el Frente Amplio, la única consigna fundacional que se mantiene firme es el "no nos moverán".
Al dirigente frenteamplista no lo mueve ni el Parkinson.
Antes se cantaba "Con el Frente Amplio, no nos moverán" Con el pueblo unido..., con la clase obrera..., con los estudiantes, no nos moverán"... hoy la canción dice: "Con 220 mil pesos de sueldo más viáticos, no me moverán"... "y si me mueven, que paguen subsidio... ¡no me moverán!".
Hay que decir la verdad, por mucho que nos duela, el revolucionario cuando te agarra el sillón no lo larga. Esto no es de ahora. El tipo podrá derrocar un régimen, romper las cadenas, liberar al pueblo, encabezar la lucha armada y jugarse la vida, pero cuando se sienta, olvidate. Es como aquel que se rompe el lomo laburando todo el día y cuando llega de trabajar le gusta sentarse a leer o a mirar televisión o a rascarse las bolas sin que nadie lo joda.
Bueno, estos no son lo que se dice revolucionarios, ni es que trabajen todo el día, pero igual se sientan a rascarse las bolas... y no hay quien los mueva.
Podés ponerle un clavo incandescente, un asiento de faquir, una katana samurái, pueden tener el culo como la cabeza de Geniol, que no sienten nada. No sé si se volvieron masoquistas o fueron perdiendo la sensibilidad en los glúteos, con otras sensibilidades que han ido perdiendo, pero dejaron de sentir los pinchazos. Con el corazón y las neuronas, se les adormecieron las posaderas.
Ahí están, aferrados al sillón desde tiempos inmemoriales, desde que el Frente era de izquierda. Desde cuando se hablaba de nacionalizar la banca y no de inclusión financiera.
Desde cuando se decía: "no al pago de la deuda externa", en lugar de mendigar "devuelvan los viáticos".
Cuando el lema era "No pasarán" en lugar de "No beberán".
La realidad es que "La Patria nos llama" quedó fuera del área de cobertura.
No nos clavaron un clavo, Esteban, nos clavaron el visto.
A qué hemos llegado... El "yankees, go home" dio paso al "never, ever" para venderle carne ovina a los milenials de Estados Unidos.
El "Todo cambia" se convirtió en "Cambio dolor por Ibupirac".
Hoy la revolución es un videojuego y la derecha neoliberal son los compañeros opositores... ¿Qué pasó con nuestros enemigos de clase, con la "burguesía proimperialista"? ¿En qué quedó el "oligarca puto"?
"A redoblar" dio paso al "A reciclar" y nos reciclamos, "porque el corazón no quiere, entonar más taquicardia"... "Rumbo" dio paso a "Rombai",? del "¡Festejen uruguayos!" pasamos al "¡De fiesta!".
"A desalambrar" dio paso a la cerca eléctrica.
"El cielito del 69" hoy es una postura sexual.
"La muralla", pum pum, ¿quién es?, es una toallita higiénica y con los escombros del muro de Berlín se levantó el muro de Facebook.
La Guerra Fría dio paso al Calentamiento Global.
Y el Tío Caimán al aedes aegypty.
"Se precisan niños para amanecer" se convirtió en "los hijos del que no hizo paro no tienen reyes magos". De pronto los reyes no son los padres, los reyes son los carneros.
"Ideal" es una yerba que estimula el tránsito intestinal y "Utopía" es un boliche.
Juan Rulfo decía que "la literatura es una mentira que dice la verdad". Por eso cuando un autor saca un libro, uno tiene la esperanza de que le mientan.
Mentíme que me gusta, Esteban. Decíme que el "hombre nuevo" no era el milenial.
Decíme que la reforma agraria no era cambiar la lechuga por la rúcula.
Decíme que el sueño de la Patria Grande no era organizar el mundial del 2030 con Argentina... ¡y que no se metan los paraguayos!
Decíme que el internacionalismo y la solidaridad no era hacerse el boludo para que el sirio Diyab se siga yendo hasta que no lo devuelvan.
Decíme que los cuadros políticos no se los llevaron con el Figari que se afanaron de la Intendencia.
Decíme que Unidad Participación y Movilización no quería decir UPM.
Decíme que la lucha de clases no era ir a la escuela a pegarle a la maestra.
Son tiempos de lo políticamente correcto y de políticos incorrectos.
Tiempos reciclados, donde el Pato Feo es un delincuente peligroso y Tom Sawyer está internado en la Colonia Berro.
Hoy Pinocho vende autos usados, Jack el destripador tiene un deshuesadero, Sherlock Holmes es Guardia de Seguridad y el Principito pilotea el avión de ALUR.
Drácula es contratista, Hamlet dirigente de fútbol y Harry Potter llega a fin de mes con un sueldo de quince mil pesos. El Cid Campeador se ha dedicado al abigeato y Martín Fierro, ya reinsertado en la sociedad, se liga unos cuantos rebencazos por querer cobrar las regalías de sus versos.
Cyrano de Bergerac le escribe a Don Timoteo. Celestina regentea un prostíbulo clandestino. Ulises está manejando un Uber, y Penélope teje para afuera. Alicia es cajera de Tienda Inglesa, Lady Macbeth preside un ente público, y a Don Quijote le sacó la Mancha Ana Durán.
Pensar que Homero era ciego y escribía, pensar que Beethoven era sordo y componía, acá lo más parecido que tenemos es el Lolo Estoyanoff, que es mudo... y canta.
Ningún autor es perfecto: Hemingway era alcohólico; Dostoievski era ludópata; Conan Doyle era cocainómano; Allan Poe fumaba opio al igual que Baudelaire; Horacio Quiroga consumía hachís; Tennessee Williams anfetaminas; Lord Byron era adicto al sexo y Jorge Luis Borges era argentino.
Esteban Valenti tampoco es perfecto, por eso hoy lo estamos acompañando en esta presentación".

 

/





 

 

 

 
Inicio Contáctenos Ediciones_anteriores Agregar_a_Favoritos
Directora: Doctora María Garzón
Administración y Redacción:
Edificio Torre de las Américas Apto.206, Calle 28 y Gorlero.
Punta del Este - Uruguay
Sitio Web optimizado para resoluciones 1024x768 y superiores.